¿Qué es la inteligencia emocional?

Inteligencia emocional y principales beneficios para niños y adolescentes

¿Sabías que las personas emocionalmente inteligentes les va mejor a nivel personal, profesional, académico y emocional?

La psicología científica ha podido comprobar a lo largo de los años que no son los más inteligentes o los más estudiosos los que tienen más éxito en la vida. En muchos casos, a pesar de sus altas capacidades,  han podido fracasar profesionalmente y en su vida familiar. Por el contrario, aquellas personas  con inteligencia emocional han cosechado más éxitos en el campo profesional y en sus relaciones interpersonales, incluida la familia. 

A) ¿Qué entendemos por inteligencia emocional?

La inteligencia emocional es la capacidad de reconocer, comprender y gestionar nuestras propias emociones, así como de percibir e influir en las emociones de los demás. 

Esta habilidad implica una combinación de competencias emocionales y sociales que permiten a las personas manejar sus relaciones de manera efectiva y adaptarse a diferentes situaciones.

Daniel Goleman, uno de los principales teóricos en este campo, popularizó el concepto y lo desglosó en cinco componentes clave:

1. Autoconciencia: Conocer y comprender las propias emociones, así como sus efectos en el propio comportamiento y las decisiones que tomamos. 

   
   

   Ejemplos:

   a) Imagínate que estás nervioso antes de hablar en público. Si eres autoconsciente, te darás cuenta de que esos nervios vienen porque quieres hacerlo bien, y eso te ayudará a buscar maneras de calmarte (como respirar profundamente), aceptar que nadie es perfecto, dar lo mejor de ti y pensar que si no lo haces perfecto, ¡no pasa nada!, lo importante es que estás haciéndolo.

   
   

   b). Quieres pedirle un cambio a un miembro de tu familia, pero te das cuenta de que estás muy enfadado porque te has sentido ofendido. Comprendes que si hablas en ese momento es poco probable que la conversación acabe bien. Decides posponer la charla para otro momento en el que estés calmado. 

   
   

2. Autorregulación: Ser capaz de manejar las emociones de manera saludable, evitando reacciones impulsivas y controlando los sentimientos negativos.

   
   

   Ejemplo: 

   Si sientes enfado, en vez de gritar o reaccionar mal, respiras hondo, dejas pasar un tiempo o practicas una técnica de relajación, mindfulness, haces ejercicio físico o cualquier otra cosa que te permita distanciarte emocionalmente y ver las cosas desde otra perspectiva. Después, cuando estés calmado, respondes de forma tranquila.

   
   

3. Motivación: Tener una actitud positiva y orientada hacia el logro, manteniendo la autodisciplina y perseverancia incluso frente a los obstáculos.

   
   

   Ejemplo: 

   Estás aprendiendo a tocar la guitarra. Aunque al principio te cueste mucho y te duelan los dedos, sigues practicando todos los días porque sabes que con esfuerzo lo lograrás. Puedes pensar y hablarte de otra manera: las dificultades no me van a echar para atrás, y una actitud positiva y optimista me permitirá lograr mis metas y objetivos y por supuesto a superar dificultades. Vivir la vida como un reto y un desafío la convierte en una aventura apasionante.

   
   

4. Empatía: Ser capaz de reconocer y entender las emociones de los demás, ponerte en su lugar y entender cómo se sienten, lo que facilita la interacción social y la construcción de relaciones saludables. Del mismo modo que tomo conciencia de mis emociones, soy capaz de entender las de los demás, ponerme en su piel y buscar el momento oportuno para el diálogo.

   
   

   Ejemplo: Tu hijo está triste porque suspendió un examen a pesar de haber estudiado mucho. En lugar de decirle "No pasa nada, estudia más", lo escuchas y le dices: "Entiendo que te sientas así. Yo también me frustraría. Si quieres, te ayudo a estudiar la próxima vez".

   
   

5. Habilidades sociales: Las capacidades para relacionarte bien con los demás, comunicarse de forma pacífica y positiva, inspirar y liderar a otros, y trabajar bien en equipo. También te ayudará a conseguir relaciones fuertes y enriquecedoras.

   
   

   La inteligencia emocional es crucial para el éxito en la vida personal y profesional, ya que afecta a cómo nos relacionamos con los demás y cómo manejamos el estrés y los desafíos.

   
   

B) LO QUE DICEN LAS INVESTIGACIONES ACERCA DE SU ENSEÑANZA A NIÑOS Y JOVENES

Numerosos trabajos subrayan que enseñar habilidades emocionales a los niños les ayuda a desarrollar mejores habilidades sociales y académicas, además de promover la regulación emocional desde temprana edad. 

1. Mejora del bienestar emocional

   
   

   • Los  niños y adolescentes que aprenden a identificar y gestionar sus emociones, tienen más control sobre sus reacciones. Esto les permite actuar de forma menos impulsiva y más adecuada ante situaciones difíciles.

   • Estrés y resiliencia: Las personas con alta inteligencia emocional manejan mejor el estrés y son más resilientes ante los desafíos y las adversidades. Además, perciben un mayor  bienestar general y una mayor satisfacción con la vida.

   • Las personas con inteligencia emocional son menos propensas a desarrollar ansiedad, depresión y otros problemas de salud física y emocional.

     
     

2. Mejora en el rendimiento académico

   
   

   • Los estudiantes emocionalmente inteligentes suelen tener un mejor rendimiento académico. Aprender a manejar la frustración, la motivación y el autocontrol les permite concentrarse en sus estudios y enfrentar desafíos académicos con mayor resiliencia mejorando su rendimiento escolar.

   • La inteligencia emocional les ayuda a tomar decisiones más conscientes, lo cual es útil para organizar sus tareas, fijarse metas y mantener la motivación.

     
     

3.  Reducción del estrés y la ansiedad

   
   

   • Aprender a manejar emociones negativas como el estrés o la frustración puede reducir considerablemente los niveles de ansiedad en la vida diaria.

   • Les permite desarrollar habilidades para enfrentar situaciones difíciles de manera saludable, disminuyendo la posibilidad de reacciones impulsivas o conflictivas.

     
     

4. Fortalecimiento de las relaciones interpersonales

   
   

   • La inteligencia emocional ayuda a los adolescentes a entender y respetar las emociones de los demás, favoreciendo la empatía, lo cual es clave para entender y conectar mejor con sus amigos, familiares y profesores.

   • Esto mejora sus habilidades sociales y facilita la construcción de relaciones saludables y sólidas con amigos, familiares y compañeros de escuela.

   • También les enseña a comunicarse de manera efectiva y a resolver conflictos de una forma pacífica y constructiva, fortaleciendo sus relaciones.

     
     

5. Aumento de la autoestima y autoconfianza

   
   

   • Al aprender a reconocer y aceptar sus propias emociones, los niños y adolescentes desarrollan una mayor comprensión de sí mismos.

   • Este autoconocimiento fomenta una mayor autoconfianza y contribuye a la autoestima, ya que aprenden a valorarse sin depender de la aprobación externa.

     
     

6. Fomenta la autoconciencia y la autoaceptación

   
   

   • Al aprender a reconocer sus propias emociones, los adolescentes desarrollan una mayor autoconciencia. Esto les ayuda a identificar sus fortalezas y áreas de mejora, promoviendo una autoaceptación sana y reduciendo problemas de autoestima.

     
     

     

     
     
     
     

7. Desarrollo de habilidades de resolución de problemas

   
   

   • La inteligencia emocional enseña a los niños y adolescentes a resolver conflictos de manera pacífica y efectiva, usando la comunicación asertiva y el entendimiento mutuo. Esto puede reducir problemas de acoso escolar y mejorar el ambiente escolar en general.

     
     

8. Éxito Académico y Laboral

   
   

   • Rendimiento académico: La inteligencia emocional está vinculada con mejores resultados académicos, ya que los estudiantes emocionalmente inteligentes son más capaces de manejar la ansiedad y mantener la motivación.

   • Productividad laboral: Varios estudios han confirmado que la inteligencia emocional contribuye al 58% del éxito en todas las áreas laborales. Además, las habilidades relacionadas con la inteligencia emocional son esenciales en trabajos que requieren liderazgo y trabajo en equipo.

     
     

9. Relación con la motivación y el aprendizaje

   
   

   • Un estudio reciente demostró que la inteligencia emocional influye positivamente en la motivación para aprender, especialmente en estudiantes universitarios. Este efecto se ve mediado por la autoeficacia y el apoyo social, lo que sugiere que quienes gestionan mejor sus emociones tienden a superar las dificultades académicas con mayor resiliencia y entusiasmo por el aprendizaje.

     
     

10. Prevención de problemas de salud mental

    
    

    • La capacidad para regular sus emociones ayuda a prevenir problemas de salud mental a largo plazo, como la depresión y la ansiedad crónica.

    • También les ayuda a ser más conscientes de cuándo necesitan apoyo y a pedir ayuda si es necesario, promoviendo una mayor autocompasión y salud emocional.

      
      

11. Fomento de la resiliencia y adaptación al cambio

    
    

    • Los adolescentes que desarrollan inteligencia emocional tienden a ser más resilientes y a adaptarse mejor a situaciones adversas o inesperadas. Esta capacidad es crucial en un mundo en constante cambio, ya que les ayuda a manejar situaciones difíciles sin perder el control

    • La inteligencia emocional les permite adaptarse mejor a los cambios, sobre todo en una etapa en la que enfrentan muchos desafíos y transiciones.

    • Ser emocionalmente inteligente fortalece su capacidad para manejar la incertidumbre y los cambios con una mentalidad abierta, lo que contribuye a una mayor resiliencia.

      
      

12. Mejora en la toma de decisiones

    
    

    • La capacidad de reconocer y entender sus emociones les ayuda a los niños y adolescentes a tomar decisiones más racionales y equilibradas, sin dejarse llevar tanto por impulsos momentáneos.

    • Esto es particularmente útil en la adolescencia, cuando toman decisiones importantes que afectan su futuro académico, personal y profesional.

      
      

13. Preparación para la vida adulta

    
    

    • La inteligencia emocional es una habilidad esencial en la vida adulta, tanto en el ámbito personal como profesional.

    • En resumen, enseñar inteligencia emocional a los niños y adolescentes no solo mejora su bienestar actual, sino que también les proporciona herramientas para enfrentar los retos del futuro con una mayor estabilidad emocional y habilidades sociales sólidas.

      
      

14. La Inteligencia emocional se puede desarrollar

    
    

    • Neuroplasticidad y práctica: Las investigaciones muestran que la inteligencia emocional no es innata; se puede aprender y mejorar mediante programas de educación emocional en la familia y el colegio y con nuestro ejemplo como padres. 

    
    

Esperamos que este artículo te haya ayudado a entender qué es la inteligencia emocional y a conocer cuáles son sus principales beneficios.